Una introducción a la lógica implica responder a cuestiones tales como: ¿Cuál es la naturaleza de la lógica? ¿Cuál es su objeto? ¿Cuál es su finalidad? ¿Cómo se estructura? Estos problemas se encuentran entre los contenidos tradicionales de la lógica y gozaban de plena actualidad en época de la Ilustración. Las consideraciones de Kant sobre este tema comenzaron ya en el período precrítico (en sus primeras lecciones de 1755), aunque ganarán en importancia con la publicación de la Crítica de la razón pura y quedarán al fin sistematizadas en su Lógica (editada en 1800 por Gottlob Benjamin Jäsche).